La Importancia de Leer
Posted on 26. mar, 2010 by Renny Yagosesky in Artículos
Dr. Renny Yagosesky
En un mundo como el actual, signado por la información, la capacidad de leer figura como una de las más importantes y valoradas. Esto, sin considerar que el ser humano tiene en el lenguaje uno de los instrumentos más poderoso para crear su realidad. Nada hay en la mente humana, para lo cual no tengamos una palabra que lo defina. Y buena parte de esas palabras que usamos para designar los procesos y objetos nuestra realidad, las hemos adquirido a través de la lectura.
Es claro que para hacer algo, debemos tener una motivación que nos impuse, una o varias razones que justifiquen un esfuerzo y que nos induzcan a apuntar y esperar algún beneficio. De allí que sea importante destacar algunas razones por las cuales usted o yo deberíamos rendirle un mínimo de tributo y tiempo diario a la lectura.¿Cuáles son esas razones?
En principio, leer nos enseña a leer. Cada vez que recorremos un texto, sea que lo hagamos en silencio o en voz alta, desarrollamos nuestra capacidad para captar y decodificar los signos de la lectura, es decir: letras y signos de puntuación. De manera que los que leen, aprenden a interpretar más y mejor que quienes no lo hacen.
Leer también nos enseña a hablar. Cada nueva palabra da amplitud a nuestro mundo mental y hace mayor nuestra posibilidad de mejorar la expresión verbal. Cuando hablamos, usamos oraciones, frases, palabras, sílabas y fonemas. La lectura nos abre un almacén de instrumentos para el diálogo y favorece en cierta medida la calidad de nuestra comunicación. ¿ O no es bien apreciado por todos aquel que tiene algo que decir, interesante, benéfico o actualizado?
Además de ayudarnos a leer y a hablar mejor, leer también es un apoyo indudable en los procesos humanos de reflexión y decisión. En virtud de que no es posible analizar o sintetizar sin información, puesto que las decisiones se toman, igualmente, usando como materia prima la información, y ya que las tres vías de absorción de información por excelencia son la lectura, la conversación y la observación, podemos decir que leer nos hace más reflexivos y nos faculta a realizar mejores y más fundadas elecciones.
Por si todo esto fuera poco, el hábito de la lectura nos ayuda a organizar el tiempo libre, nos mantiene activos cerebralmente y nos abre al mundo de la actualidad, a través de la prensa escrita y de las publicaciones impresas de todo tipo.
Cómo sería nuestra vida si no tuviésemos nada para leer, o si perdiéramos de pronto esta mágica facultad que nos coloca por encima del resto de las especies vivas del planeta.
A veces me preguntan qué leer, por dónde empezar desarrollar el hábito y el placer de la lectura. A esto he respondido, que lo mejor es leer lo que nos gusta, lo que nos estimula, lo que despierta nuestra curiosidad, lo que consideramos que nos hace falta aprender o, simplemente, también podemos leer todo material comprensible que caiga en nuestras manos.
Podemos leer al principio unos poco minutos, hasta irnos acostumbrando a leer por espacios de tiempo cada vez más amplios. Podemos escoger lugares adecuados o leer en grupo, con gente que nos agrade. Cada persona del grupo puede leer un rato y se alternan para que todos sean emisores y oyentes a la vez. Pueden hacerse lecturas para meditar o para discutir y polemizar amistosamente. Todo depende de la naturaleza del tema y de la personalidad y objetivos de los miembros del grupo. Igual podría hacerse en pareja o en familia. Lo requerido es el material que se leerá, la motivación, y el tiempo y lugar de calidad.
De manera que aunque no tenga usted la capacidad de Bertrand Russell quien leía a una velocidad de 1.200 palabras por minuto, ni posea el tiempo para leer los más de 50 libros que escribió Isaac Asimov, bien puede colocar en su agenda diaria o semanal un tiempito dedicado a este fructífero y nutritivo don, el don de la lectura. Gracias por leerme.